Un carlista en la fiesta de la democracia
Nuestras primeras elecciones y unos alienígenas en Montserrat
Soy un adicto a los documentales grabados en los años que van del 73, año en el que nací, hasta mediados de los 80s, cuando ya empiezo a tener uso de un mínimo de razón. Un mínimo. Porque razón plena nunca he llegado a tener. Creo que esto os lo contaba no hace muchas semanas en el post dedicado al espeluznante true crime El asesino de Pedralbes, de los pioneros en este país. Disculpad si me repito, con esta son ya 128 cartas de amor que os envío.
El otro día en ese Facebook que cuando me levanto pienso que voy a cerrar el día menos pensado, me encontré con un post que justifica que lo mantenga abierto un poquito más. Juan Carlos Usó, experto en muchas cosas pero sobre todo en la historia de las drogas en nuestro país, se despedía de un amigo, Esteban Escobar (foto de arriba extraída de lwsn), del que explicaba había dirigido el documental Bon cop de falç, en el que se recogían imágenes de los momentos previos a las primeras elecciones en este país después de la muerte de Franco.
Me lo he gozado este fin de semana de lluvia.
¿Os habéis dado cuenta de que desde que escribí sobre la lluvia intensa en Nápoles no ha parado de caer agua en Barcelona ni un sólo día?
Los carlistas estaban bien
Esteban estuvo exiliado en Francia durante muchos años y ahí es donde hace los contactos necesarios para organizar este experimento audiovisual, digamos, antropológico. Llegó a Barcelona a principios de junio de ese año 1977 entrando por una Meridiana bastante reconocible -y es que 48 años no son nada-, junto a la investigadora del Centre National de la Recherche Scientifique, Nadine Wanono (se trata del primer organismo público de investigación de Francia, con un montón de premios Nobel en sus equipos de trabajo). De hecho, el documental se exhibió primero en Francia para quedar en el olvido, hasta que el hermano de Pascual Maragall, Pau Maragall aka Pau Malvido, lo recuperó para un pase privado con sus amigos.
Lo primero que dice una voz en off en el vídeo es que el documento ha sido grabado “con una Súper 8 prestada por una facultad y con unas películas ofrecidas a mitad de precio por una institución cultural del país vecino”. Después se habla del objetivo del vídeo, no es otro que tomar declaraciones de votantes de a pie ejerciendo el derecho al voto por primera vez desde la II República. Por la entrevista que tenéis más abajo con el director, en realidad la dupla tenía que haber seguido las vivencias de una familia media barcelonesa que al final no encontraron y entonces decidieron recrearse en los personajes que pululan por la pensión Moderna del número 40 del carrer Pelai.
“Los dirigentes de los stands distribuían sus folletos con la misma ligereza y decisión con la que se puede vender un chorizo. Las mujeres luchaban doblemente, puño catalán impreso sobre su pecho ofrecido en la ocasión a la vista de todos”.
Un altavoz grita por ese flamante aire de libertad de junio de Las Ramblas del 77, se reconoce algo así como “oligopolios” y “empresas imperialistas”. Y es que, como hemos dicho antes, 48 años no son nada y poco ha cambiado desde entonces. También se abucheaba a los helicópteros que tantos duros nos cuestan a los contribuyentes. “Si los hijos de puta volaran, nunca veríamos el sol”.
Una mujer asegura que votará por Suárez “porque es el más guapo”. “A mí me gustan los hombres guapos. Claro, si es el más guapo, ¿por qué no? De lo demás no me aclaro”. 48 años después, a Pedro Sánchez le gusta esto.
El documental se queda pegado a las encendidas discusiones de las inmediaciones de Canaletes. De cuando se discutía en Las Ramblas de cosas importantes, como el último partido del Barça -en ese momento Cruyff juega en el Barça- o de los vaticinios de las primeras elecciones democráticas.
“-¿Qué piensas de este derroche de papel?.
- Pues que es lógico en unas elecciones y da trabajo a los compañeros de las artes gráficas.
-¿Así que el sector de las artes gráficas va a salir de la crisis? ¿Y quién paga todo esto?
- Estamos pagando todo el pueblo. Sobre todo a la candidatura de Suárez”.
Lo que no entiendo muy bien es porque Esteban se empeña en llamar al molt honorable «Tarradelas», incluso he oído un «Talarrellas», siempre en relación a los rumores sobre su posible vuelta a Catalunya después de un largo exilio. ¿Y por qué nadie le corrige?
“-¿Qué piensa del aborto?
-Lo veo justificado cuando la sociedad no puede mantener a todos los hijos que nacen”.
Llegan también de esa misma pensión las declaraciones de Montse «la travesti», nos explica que tiene que volver a la cárcel y que cuando salga se operara de lo que le falta, porque pechos ya se puso en Canarias donde estuvo cumpliendo la primera parte de la pena. “Yo es que no entiendo nada de política. Yo entiendo de mi trabajo. De travestís, del teatro y de los cabarets…”.
Pero lo mejor del documental, a mi entender, viene de parte de la portavoz del grupo feminista AFUS (¿?), en lo que supongo es su habitación, oscura como una cueva, lo que no le impide lucir gafas de sol, aboga por reducir la crispación de los mítines del feminismo más agresivo que tilda de «neomachismo». “Estamos por el celestinaje y fomentar la putería congénita que todas las mujeres llevamos dentro, pero no con fines coquetescos, si no como elemento de auténtica defensa”. La tal portavoz es la periodista, “adalid“ del feminismo del momento, Momi Monell (Mujeres frustradas) y en los títulos de crédito se le dedica el documental in memoriam, pero no sé mucho más porque no hay ni rastro en internet.
También muy fan del «privilegiado» dueño de la susodicha pensión que vota dos veces porque le llegaron dos padrones ya que su establecimiento tiene dos puertas. Un voto para los socialistas y otro para la Falange auténtica. “Y si hubiera tenido tres puertas hubiera votado también por los Católicos”.
Me pasa el mismo Juan Carlos Usó una entrevista al recientemente desaparecido director dividida en dos partes que data de 2023 (primera parte y segunda).
La verdad es que me la chupé también de una sentada este pasado sábado por la noche. He flipado con la vida de Esteban. Me advierten que fue un tipo de claroscuros. Quedémonos con la luz, ya habrá tiempo para lo demás. Me comentan que la entrevista se realizó en el transcurso de un año. Está editada con fragmentos de diferentes encuentros entre el entrevistado, Carlos Grasa del espacio La Cala y el propio Esteban. Se nota muy trabajada en todo caso. Para pasar en las aulas de periodismo.
Conocemos las experiencias de gente de izquierdas, o de independistas, en el frío exilio, pero yo al menos no había leído ni escuchado nada sobre el destierro de un carlista. Esteban es el exótico de entre los españoles que se encuentra en París.
De hecho, cuenta Esteban que se arrima al carlismo porque a su Navarra natal no llegan ni el comunismo, ni el socialismo y que los únicos niños que en el colegio no cantaban el cara al sol eran los mismos que quemaban los libros del espíritu nacional, es decir: los carlistas. “Y pensé, ah pues mira esta gente está bien”. Para añadir que en los 60 el carlismo era un “burdel auténtico”. Sea como fuere ese burdel, él con pocos años llegará a engrosar las células de acción violenta de esta “organización semi tolerada” que se llamaba comunión tradicionalista carlista.
Cruza la frontera francesa andando cuando tiene que huir de la policía por violento y lo primero que lee en el país vecino es el catálogo de venta por correo de un distribuidor galo. “En España no sabíamos que era vender a distancia”. Ni eso, ni muchas otras cosas. En París estuvo trabajando en el restaurante Los Faroles que regentaba la cantante Anita Morales, lo mismo te cantaba en francés que en español.
“Vi muchas cosas que no me gustaron en el ambiente del exilio. Miseria afectiva... Mucho contrabando mezclado con la política. Mucho macho. Mucha paranoia. Y encima estaba fumando cannabis con lo que debía tener un autocontrol mayor”. Abandonará las ideas radicales y la justificación de la violencia después de pasarse con la cantidad de LSD en una toma en la universidad de París. Para que después digan de las drogas…
Miracle a Montserrat
Tenéis más información actualizada de este documental y otros muchos en La Web Sense Nom, especie de cajón de sastre en el que llegó a participar el propio Juan Carlos Usó. Una web en la que se intenta poner en valor el movimiento underground de Barcelona, algo eclipsado por la modélica y tierna movida madrileña.
Usó me ha puesto en contacto con Canti y este me comenta que Juan Carlos escribió uno de los posts más polémicos de toda la web: “Nos matan con heroína, una conspiranoia?”. Un artículo en el que desmiente la teoría de que existiera una confabulación para introducir la heroína entre los círculos de jóvenes abertzales y acabar con ellos. El hilo de comentarios airados por parte de la izquierda, en su mayoría vasca, se estiró cinco años en el tiempo y sólo se acabó cuando Esteban decidió que ja n’hi havia prou y cerró el hilo de comentarios.
“Yo soy de la opinión de que la heroína no tiene un poder mágico que es capaz de enganchar a la gente tan fácilmente. Los mismos médicos saben que a una persona le das morfina durante un mes y se la retiras y no pasa nada. Y con la heroína pasa tres cuartos de lo mismo”.
En la web tenéis el documental en el que se ve a los Gong (foto superior) tocando en el altar mayor de la basílica de Montserrat. El director de esta locura fue Manel Esteban Marquilles responsable también de llevar a la gran pantalla las Historias de la puta mili del cómic de Ivà. Hasta cuatro artículos con cuatro testimonios diferentes tenéis en la web sobre la relación de la banda de Daevid Allen con la montaña mágica.
Son conocidas por todos, las condiciones psicodélicas de estas montañas en las que la gente se reúne para ver OVNIS sin necesidad de ingerir sustancia alguna.
Así que ayer por la tarde pude hablar con el gestor de la web Canti Casanovas, que me explica lleva un tiempo adecentando la plataforma y algunos posts a los que ha ido añadiendo contexto. Como medio año haciendo transvase de contenidos al nuevo Wordpress después de que el responsable original de la iniciativa falleciera hace tres años.
Qué jodido es el entorno digital y su conservación. No hace falta que os diga que he sufrido datástrofes de las que todavía no me he podido recuperar. La inteligencia artificial campando a sus anchas e inventándose un pasado que nunca fue y mi legado archivero de 17 años documentando las escena musical electrónica barcelonesa resbalando para siempre por el sumidero de internet.
Canti me comenta que tuvo bastante contacto con el recientemente Esteban hasta el último momento y que estaba pendiente de él porque vivía en un “cuchitril” en Aluenda, un pueblo con una iglesia y cuatro casas en Aragón. Me explica que él subió dos veces la película que nos ocupa a internet y que recibía ofertas para proyectar la película en pases públicos. “Esteban vivía con una paga de 400 euros. Con la proyección de la película podía ganar cien euros, bienvenidos eran”.
Este post se lo debemos entero a Juan Carlos Usó al que unos amigos y servidora entrevistamos en Espai Coll De l'Alba de Tortosa, un lugar mágico en el que pudimos departir con otros psiconautas. A Usó lo entrevistamos en calidad de autor de los libros "Spanish Trip", la historia de los tripis en nuestro país, y "Arroz, horchata y cocaína", la triple corona nutritiva de nuestros primos valencianos.
Por cierto, en el vídeo Juan Carlos explica una anécdota muy divertida en relación a los vascos, la heroína y Tailandia.
Me encantan tus posts. A mí me puedes preguntar sobre lo que quieras, ya sean las primeras elecciones, el partido "HUMANISTA", cuyo logo era el símbolo del infinito, o mis visitas, por hacer una contraposición, "Como cada 11 de cada mes" a ver un ramito de UFOS a un punto concreto de Montserrat...JAJAJA