“The internet is not a machine for communication between people, but for simulating the experience of being among people, so much so that even broadly well-adjusted types spend more time interfacing with simulations on a screen than actually experiencing the world in and through the company of others. In this context, friendly writing isn’t just friendly writing, it’s writing that simulates friendship”.
El otro día leí una newsletter en la que un tipo con más de 10.000 suscriptores, casi 1.000 de pago, se extrañaba de tan buenas cifras ya que, convenía no seguir ninguna de las normas aceptadas en esto de confeccionar boletines.
Es decir, reconocía escribir textos demasiado largos, con frases de hasta 229 palabras (“if a sentence extends to 43 words, comprehension falls to 10%”), no utilizaba párrafos, y trataba de manera condescendiente a su audiencia a la que ha llegado a insultar.
Es decir, reconocía que maltrataba a sus lectores.
Una sacada de chorra en toda regla.
Según Sam Kriss, el responsable de esta newsletter con nombre de canción de The Fall, por lo general, “la gente quiere leer escritos simples, claros e informativos que contengan hechos que ya conocen, o escritos simples, claros y polémicos que expresen opiniones que ya tienen. La gente por norma quiere leer hechos que ya conocen para poder asegurarse de que ya comprenden bastante bien las cosas y que el mundo no contiene ningún secreto potencialmente aterrador”.
¿La gente? Toda menos sus suscriptores que, recuerdo, son más de 10.000.
Y después están los lectores que “quieren leer opiniones que ya tienen porque, aunque siguen echando espuma por ellas, no tienen bases reales para sustentarlas, por lo que necesitan un refuerzo constante para mantenerlas en su lugar, o de lo contrario, lo que queda de sus cerebros se esparcirá por el suelo”.
Sospecho que es por esa razón, por la que mi último boletín, el de Israel, tema que da para un buen refuerzo de nuestros prejuicios, se disparó en visibilidades en las primeras dos horas de reposar en tu email. Y eso que no quería hablar de Israel en esta newsletter, pero tenía material reseñado de esos tres libros y no quería echarlo a perder.
“A veces digo cosas que se parecen a lo que creo, pero cuanto más avanzo, más superficial se vuelve el parecido, hasta que al final presento una caricatura espantosa que defiendo con mis dientes. A veces defiendo muy sinceramente posiciones con las que no estoy ni tan siquiera un poco de acuerdo, simplemente porque todos los demás parecen haber llegado ya a mi conclusión real y, por lo tanto, la han convertido en una aseveración aburrida”.
Como profesor también comento a mis alumnos una serie de normas para escribir la newsletter perfecta, que después yo en mis propios proyectos soy incapaz de seguir, aunque quisiera, porque no soy nada metódico.
Consejos doy, que para mí no tengo.
Y lo que no tengo seguro son esos 10.000 subscriptores de Sam Kriss.
Esta semana he retomado “Desde dentro” de Martin Amis, libro del que os hablé apresuradamente la semana pasada, y he llegado al punto donde comenta justo lo contrario en relación a eso de “castigar al lector”. [Los consejos del dandy inglés van dirigidos a escribir una novela (“los lectores entran en casa de uno como desconocido; para tranquilizarlos y hacer que se sientan cómodos, lo primero que se hace es darles calor”), y no a confeccionar una mísera newsletter que, no nos engañemos, vas a leer en tu móvil mientras te llega la inspiración en el WC].
“Aprovecha la primera oportunidad para ofrecerles a los lectores un poco de aire tipográfico: una pausa, un subtítulo, otro capítulo. (…) Ellos agradecerán que les des ocasión de coger aliento y prepararse para seguir: y tu también”.
Otro punto importante que toca Amis es el de la “contribución misteriosa del subconsciente”. Uno empieza de joven a escribir sin pararse a pensar en su existencia, y ni mucho menos en su poder. Si alguna vez has releído tu diario de cuando eres adolescente (o has exhumado alguno de los recuerdos de Facebook), te habrás percatado de la “contribución misteriosa” de esta “fuerza sobrenatural”. Me gustaría seguir ahondando en este tema en entregas posteriores.
Más consejos interesantes que he apuntado con un post-it amarillo tienen que ver con la afectación del escritor. Muchas veces esa artificiosidad viene dada por evitar la repetición de una palabra en una misma frase (“un tabú malentendido”). Yo por si acaso tiro de equivalentes. Pero tampoco hay que caer en la tentación de los sinónimos rimbombantes. Uno debe tener al lado el diccionario de sinónimos para conseguir que esa frase sea “más aerodinámica”. Recurre a ellos para perfeccionar el ritmo, no tanto el contenido.
Hace unos días una lectora me comentó que “La Semanada” le podía atraer mucho un lunes y absolutamente nada el siguiente.
Bueno, de eso se trata.
Que te suscribas para recibir lo que no te esperas.
Pero lo hago por mí, no por ti.
Porque me gusta hablar de muchas cosas, algunas las acabo de conocer.
Y porque no soy tu amigo de verdad. Me pudo permitir el lujo de intentar sorprenderte sin necesidad de utilizar esas mismas armas que utilizan esos que dicen ser tus amigos de ahí afuera.
No quiero que te sientas menos solo cuando lo que quieres realmente es estar menos solo.
El podcast de la clase
Entre mis lectores se encuentran algunos de mis alumnos del certificado profesional de Gestión de Marketing y Comunicación de la escuela Formació Miró. Esos mismos alumnos a los que doy consejos de cómo escribir newsletters, que yo no sigo, se han suscrito en número reducido.
Durante la última semana de clase estuvieron presentando sus proyectos personales a través de la simulación de un podcast. Con todas esas grabaciones he pespunteado el podcast de este mes.
Entre los temas que he utilizado, y tenéis en el tracklist de más abajo, he echado mano de algunos temas gratuitos (ya sabes que si la música es gratis entonces el producto eres tu).
Por ejemplo, del primer número de la serie “Jezebellearic Beats Volume 1”, edits piratillas autoeditados por el colectivo londinense Jezebell y con descarga por cero euros. Poca información tengo para daros, no están ni registrados en Discogs.
Para piratillas, nosotros en esta newlsetter.
La portada homenajea al primero de los recopilatorios que recogían (o saqueaban directamente) el sonido gestado en Ibiza, ese “Balearic Beats Vol. 1” publicado en Inglaterra en un temprano 1988 (curiosamente armado con temas de grupos como Nitzer Ebb o Code 61 que, con el tiempo, hemos ido asociando más a Valencia).
Vale una escucha, ni que sea para prepararnos a echar de menos el verano cuando acabe en noviembre o diciembre.
No, en serio, además de algún hitazo muy reconocible, tiene temazos como “Hypnorise” o “Trading Places (11AM)” y esta ese enigmático y magnético “Concurrence”, que creo es mi favorito hasta que lleguen las Navidades.
Otro disco en descarga gratuita, del que he sacado petróleo porque sólo me gusta el tercer corte, es este “Powder Wax Vol. 1” del productor sueco Jesse Black Fahnestock, responsable del proyecto 10:40.
Si queréis seguir engordando ese pendrive que siempre lleváis encima por si en alguna encerrona os dejan pinchar, también tenéis este destacable edit de Benedikt Frey sobre el original de Notorious B.I.G., “Hipnotize”, primer single de su LP, “Life After Death” de 1997.
Tracklist podcast de la clase
Nicola Cruz - Subtropique
Jezzebelle - Concurrence
Takenoko - Trans Amor Express
Powder Wax Vol. 1 feat. S.A.A.R.A - Little Black Dress (Undressed Dub)
Notorius BIG - Hypnotize (Bendikt Frey Edit)
Soos - Mundo cute
Front 242 - Animal Gate (Future City Punks Edit)
The Bionaut - Octopus
Puma & The Dolphin - Golden Coast
Pleasure Voyage - Hot Tempation (PV Edit)
También vengo con algunas novedades
Me he llevado una buena sorpresa cuando me he enterado de que uno de mis belgas favoritos del momento, el veterano productor y Dj soFa elsewhere, publicará su primer LP en solitario en un sello madrileño, Glossy Mistakes. Sorpresa porque es un artista que he descubierto hace cuatro días (aunque todos mis amigos me han recordado que el belga lleva mucho tiempo en esto) y me hace gracia que sea un sello madrileño el que le publique su debut en largo.
Los títulos de temas como “Fake Yourself” y otros juegos de palabras como “Morning Moodytation” se encargan de apuntalar la idea de que, efectivamente, estamos ante un auténtico personajazo.
Así que voy detrás de él a ver si me concede una entrevista. La verdad es que estoy sufriendo de ghosting en algunas de mis últimas propuestas. Que recuerde, así a vuelapluma, tengo cuatro formularios esperando a que me los devuelvan. Debo reconocer que me da mucha pereza ir detrás de la gente para estás cosas. Hay que entender que la promoción también se la hago gratis.
Y a todo esto desde hace ya tiempo me pregunto si es de interés una entrevista de este tipo en el actual contexto. Y me temo que la respuesta se acerca al no. Pero todo sea por el nicho. #fakeyourself
El belga cuenta con otro álbum de hace dos años, en este caso a medias con Clara Vellin (encargada de las voces, sintes y el arpa celta), un proyecto llamado CCCVVV (y en el que compruebo Dj Sofa se atreve con el micro, por ejemplo, en el tema que tienes más abajo). Se publicó en el sello Strangelove Music que se presenta en Soundcloud con la etiqueta “balearicbraindance”, por supuesto, me encanta y así os la he puesto.
“The album collects whispers of 60’s chanson and psyched out chords, holding a playful spirit throughout”.
Por otro lado, comentaros que la socia del añorado Andrew Weatherall en proyectos como Sabres Of Paradise y vocalista de algunos de los primeros trabajos de Primal Scream, nos entrega una nueva remesa de su serie “Apparently Solo”.
Nina Walsh sigue sacando oro de la mina de archivos que heredó de su difunto socio Erick Legrand. Loops, ritmos de batería y cuerdas compuestas por el propio Erick en la cama de hospital durante pasó sus últimos días y con los que comenzó a trabajar Nina a modo de homenaje en su estudio en 2016, en un proyecto llamado Woodleigh Research Facility.
No os canso más.
Hasta la semana que viene.
El podcast de la clase